La mayoría de los teléfonos estaban ocultos en la grieta de una pared del pabellón 16, donde se encuentra alojado Francisco Riquelme, vinculado a distintos ataques en los barrios Ludueña y Empalme Graneros. Este jueves varios miembros de su organización serán imputados por asociación ilícita
Una investigación a cargo de dos fiscales rosarinos derivó en el secuestro de más de 40 celulares en la cárcel de Piñero. La mayoría de los dispositivos estaban ocultos en la rajadura de una pared ubicada en uno de los pabellones donde se encuentra detenido Francisco Riquelme, un joven vinculado a la banda de Esteba Alvarado, que es investigado por violentos ataques en los barrios Ludueña y Empalme Graneros de la zona noroeste de Rosario.
Según informó el Ministerio Público de la Acusación (MPA), la Unidad Carcelaria N° 11 fue allanada este martes por los mismos empleados del Servicio Penitenciario, quienes encontraron 36 celulares en el pabellón 16, donde está alojado Riquelme, además de otros seis aparatos en celdas aledañas.
Voceros del caso dijeron que en la celda que tenía el “nido” de celulares estaban reclutados Carlos Salvador O. y Leonardo Ezequiel G., los cuales serán imputados el próximo jueves por los fiscales Adrián Spelta y Patricio Saldutti. Ambos funcionarios, junto al fiscal Luis Schiappa Pietra, integran un equipo de trabajo que investiga a la banda de Riquelme.
En el marco de esa causa, el viernes pasado realizaron allanamientos junto a efectivos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y detuvieron a tres hombres y a tres mujeres, quienes también serán imputados este jueves. En principio, la banda será acusada de los delitos de asociación ilícita, balaceras y tenencia ilegítima de arma de fuego.
Además, la organización está sospechada de tres homicidios en zona noroeste: el de Natalia Andrea Longhi, perpetrado el 6 de enero en Pasaje Franco al 2000; el de Cristian “Larva” Fernández cometido el 14 de abril en Gorriti al 6200, y el de Miguel Alejandro Ramírez, asesinado el 20 de junio en De la Salle al 5800.
Riquelme está considerado por los investigadores como un ladero de Alvarado, y enfrentado en barrio Ludueña a quienes responden a la banda Los Monos, entre ellos Andrés Benítez, Julián Aguirre, Mauro Gerez y Jonatan Almada, quienes ya fueron imputados junto a más de 20 personas.