La gestión del ex ministro de Seguridad del socialismo Maximiliano Pullaro se vio envuelta en la corrupción policial, los vínculos con el narcotráfico y las críticas dentro de su propio espacio.
La gestión del ex ministro de Seguridad del socialismo Maximiliano Pullaro se vio envuelta en la corrupción policial, los vínculos con el narcotráfico y las críticas dentro de su propio espacio. Las denuncias de Elisa Carrió dejaron expuestos los oscuros nexos del actual diputado provincial.
«Nunca voy a estar con ese señor Pullaro. Nosotros no vamos a jugar con los responsables del narcotráfico. O Santa Fe enfrenta al narcotráfico o se terminan los santafesinos», afirmó Elisa Carrió sobre el ex ministro de Seguridad del socialismo Maximiliano Pullaro. Es que el ahora diputado provincial protagonizó los casos más resonantes de vínculos con el narcotráfico durante su paso por el Ministerio de Seguridad provincial, entre el que se destacó la condena a 10 años de prisión para su ex jefe de inteligencia de Drogas Peligrosas, Alejandro Druetta, como «partícipe necesario» en el delito de tráfico de estupefacientes, tras el veredicto del Tribunal Oral Federal Nº 3 de Rosario.
Cada vez que Pullaro toca temas de seguridad, varios dirigentes de su propio espacio se incomodan y sorprenden. Es que Pullaro también se vio involucrado en el desvío de fondos destinados a su cartera, tras la imputación de su ex secretario de Control de la Policía de la provincia de Santa Fe. Por esa investigación, se descubrió la trama que involucró el pago de casi 1 millón de pesos a un estudio de abogados que defendían policías acusados en el secuestro, tortura y desaparición de un joven rosarino, Franco Casco.
El actual diputado Pullaro tiene un largo historial de irregularidades durante su paso por el gabinete ejecutivo provincial, lo que hizo que importantes figuras de su espacio político lo releguen. “No es confiable”, aseguraron en su entorno político.
